Los gansos vuelan 72% más lejos en formación que cuando vuelan solos. A medida que cada pájaro aletea, crea impulso al pájaro que le sigue. Cada vez que un ganso sale de la formación, de repente siente el peso y la resistencia de tratar de volar solo y rápidamente regresa a la formación y se aprovecha del impulso que le brinda el pájaro inmediatamente del frente de él.
Los gansos en formación graznan desde atrás como una forma de animar, dado que el ganso que está en la punta de la V no puede virar su cuello para ver si los demás gansos aún están siguiendo. La fuerza del viento que azotan al ganso es tan intensa que si él vira su cuello se le partiría al instante. Por tanto, los gansos graznan para animar al líder a que no pare, para dejarle saber al líder que ellos todavía están en formación detrás de él, que todavía están apoyándolo. Cuando el ganso del frente se cansa, rota a la parte de atrás de la formación y otro ganso asume la posición de la punta.
Los líderes que comparten una visión, pueden manifestar dicha visión más fácil y rápido cuando actúan juntos como un equipo comprometido, que cuando actúan solos. Cuando un miembro del equipo está jugando al 100%, inspira a los otros miembros del equipo y hace que sea más fácil para ellos crear resultados. Cuando un miembro del equipo sale de la cancha durante el juego, el juego se detiene. Todo el mundo cuenta. Cada miembro del equipo puede causar o detener la manifestación por la que el equipo trabaja. Los miembros del equipo empoderan al equipo con su entusiasmo y motivación.
Un equipo poderoso comparte el liderazgo del equipo.